SALVAJE CRIMEN Y VIOLACIÓN EN EL ARENAL.
Ayer por la mañana temprano un vecino de la calle Velarde descubrió el
cadáver de Margrett McAlessee, ciudadana británica procedente de las islas
Shetland, según reza la documentación que, entre muchas posesiones personales,
portaba la víctima, y que se dedicaba a vagabundear por el barrio.
El susodicho la encontró bañada en un charco de sangre, desnuda de
cintura para abajo. La autopsia desvela una sanguinaria violación cometida
por un psicópata de fuertes tendencias sádicas y por lo tanto extremadamente
peligroso.
Margrett fue golpeada repetidamente en el rostro que apareció lleno de
moratones y magulladuras, fue violada, pues se ha hallado semen del agresor,
y recibió numerosas puñaladas por distintas partes de su cuerpo, especialmente
en la zona genital. La muerte le fue causada por seccionamiento de la medula
espinal a la altura de las vértebras cervicales.
La policía descarta móvil alguno pues, según el jefe de policía, la
brutalidad gratuita y el ensañamiento apunta más bien a un criminal sádico
que pudo escoger su víctima al azar.
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